Sólo pensando...
Entre el vaivén de mis ideas, me límito a expresar que nada tiene sentido si no se lo damos. Diariamente vemos ejemplos, frases, imagenes de alegría. Conocemos todas las reglas para mejoras y ser felices, y generalmente nos sentimos estancados. ¿Por qué? Esos días de ánimo y alegría suelen ser solo unos pocos del calendario. Los demás son lamentos, incertidumbres e insatisfacción. Nos quejamos diariamente y nos embarramos del lodo de la mediocridad cuando sintiendonos conformes de la situación tétrica en la que nos encontramos. Tenemos miedo a fracazar, pero no intentamos. Tenemos miedo a estar solos, nos encerramos y desconfiamos. Nuestras palabras y nuestros actos se contradicen... Nos dejamos llevar de las emociones. ¿Qué rayos nos pasa? No nos detenemos a apreciar, a observar, a entender y a amar. Ya es tiempo de disfrutar...