Entradas

Mostrando entradas de septiembre, 2014

Autocensura

Las ganas de hablarte se convirtieron en insomnio He perdido el juicio, mi corazón hermético no me da el permiso. Y aunque no pueda decírtelo, estoy mal por ti, por nosotros, por el ayer. Puedo entenderlo todo y no creer nada. Ya de por sí me he entregado por completo y poco he recibido. ¿Cobardía u orgullo? Mientras más preguntas logre responder, aumentan las dudas y... Y punto, nada más.

No Ser

Mantenía esa puerta cerrada,  aún así el frío se escabulló por una ventana entreabierta. Descubro una lágrima reseca, deja su huella invisible, mas consume mi flema. De nuevo el mismo dilema: ser o no ser. Muero por ser, muero sin ser,  soy un ser que no quiere ser más. El aquello que perdió el sentido a mitad de carretera, la etiqueta sin nombre. El ruido deforme de un violín desafinado,  de un grito de auxilio, de un adiós desamparado.

Desenlace

Aquél sueño se desvaneció al igual que aquellos recuerdos que atesoraba. Tu voz dentro de mi cabeza a veces es música, hoy es tormento. Lluvia torrencial de amargura, tornado de lamentos, terremoto en mi pecho. No existe cura para un corazón roto, no existe el amor sin sufrimiento. Mi propia mente se burla de mí, otra vez... Tu imagen en mi cabeza escupe sobre mis heridas. Hoy me rindo.

Monólogo

Soy lo que queda después de amar y darlo todo... Un suspiro que lentamente se evapora. Me escondo detrás de tu mirada, me vuelvo nada. Mi corazón inerte va desapareciendo junto a la sombra tuya que lo abrazaba. Busco algo que no existe, que murió junto a tu orgullo: La Esperanza. Me inundo en vicios que envenenan mis sentidos,  así como tu me intoxicaste el alma. Te miro a lo lejos, chocamos la miradas.  ¿Acaso me estás espiando? No me toques por favor, soy vulnerable y aunque te siga amando, mi corazón despechado no quiere saber de ti. Sin embargo, de ti lo sé todo, hasta lo que me ocultas detrás de tu expresión hueca, de tus frases a medias, de tus mentiras disfrazadas de razón. Duele, duele tanto que ni entiendo porque sigo aquí, extendiendo mi mano para ser torturada, entregando mi amor, recibiendo punzadas.